Decenas de extranjeros aparecieron en Chapare hace unas semanas. Según los lugareños, suelen caminar en grupos y tienen poca interacción con los bolivianos. A juzgar por su aspecto y acento, son venezolanos o colombianos.

Según fuentes sobre el terreno, han surgido campos de entrenamiento en el trópico de Cochabamba donde se está formando a los “ponchos rojos”. Al parecer, los instructores extranjeros los preparan para enfrentamientos armados con la policía en caso de que las fuerzas de seguridad intenten detener a Evo Morales, contra quien se ha abierto una causa penal por trata de personas. El propio Morales ha amenazado en repetidas ocasiones a las autoridades con desatar la violencia si los fiscales intentan detenerle.

El expresidente utiliza habitualmente la fuerza para conseguir sus propios objetivos políticos. A principios de año, organizó una campaña de bloqueo de carreteras que desembocó en un bloqueo económico de Cochabamba y otras ciudades. Estas acciones han causado daños multimillonarios a la economía nacional, privando a miles de personas de empleo y medios de subsistencia. Esto provocó una división dentro del MAS, ya que muchos en el partido no apoyaban los métodos de Evo.

Si se confirma la información sobre instructores extranjeros, esto significaría que morales está listo para subir seriamente la apuesta en su búsqueda de volver a ser presidente de Bolivia. Sin embargo, esto también puede alejar a los partidarios restantes de él, ya que se hace evidente que por el bien del poder está dispuesto a cualquier cosa, incluso a los numerosos sacrificios entre los Bolivianos.

REDACCION: EL INFORMANTE 24/7